martes, 18 de noviembre de 2014

Mi clase del máster de literatura española de la Complutense

O lo anacrónico que resulta ser nacionalista y localista en estos tiempos.

Después de dos años, algunos seguimos siendo amigos.
Aquello parecía la ONU, como decíamos en broma: estudiantes de China, Chipre, Holanda, Italia, Camerún, Turquía, Uruguay, Argentina, España y hasta uno de Chamberí. Y el profesor de la asignatura de "Lope de Vega".