Del muro de facebook de mi amigo camerunés Patrick -que está haciendo en España una
tesis doctoral sobre unos escritores españoles-, tomo esta historia.
Espero que os guste a mis amigos.
Una
señora de cincuenta y tantos años llega a su asiento en un vuelo lleno
de gente y al llegar y verlo no quería el asiento. El asiento estaba al
lado de un hombre negro. La mujer disgustada llamo inmediatamente a la
azafata y le exigió un nuevo asiento. La
mujer dijo "No puedo sentarme aquí junto a este hombre negro". La
asistente de vuelo dijo "Déjeme a ver si puedo encontrar otro asiento".
Después de hacer una comprobación la azafata volvió y dijo "Señora no
hay más asientos en clase turista, pero voy a consultar con el capitán a
ver si hay algo en primera clase". A los 10 minutos la azafata regresó y
dijo "El capitán ha confirmado que no hay mas asientos en clase
turista, pero hay uno en 1º clase. Es política de la empresa nunca mover
a una persona desde la clase turista a primera clase, pero sería un
escándalo obligar a una persona a sentarse junto a una persona
desagradable, el capitán accedió a hacer el cambio a primera clase".
Antes de que la mujer pudiese decir nada, la azafata hizo un gesto hacia
el hombre de color y le dijo: "Por tanto, señor si usted es tan amable
de recoger sus objetos personales, nos gustaría que se moviese a la
primera clase, pues el capitán no quiere que usted se siente junto a una
persona desagradable." Los pasajeros de los asientos cercanos dieron un
aplauso mientras que otros dieron una ovación poniéndose en pie.
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