jueves, 31 de mayo de 2018

Una reflexión sobre el arte.

El arte es un recuerdo continuo de aquello que el espíritu deja fuera, de aquello que no es arte" (a propósito de una exposición de Silvia Japkin con esculturas literarias).

Silvia es una artista argentina formada en Israel que ha inaugurado en Madrid una exposición como homenaje a la literatura, coincidiendo con la Feria del Libro:

https://www.20minutos.es/noticia/3351953/0/silvia-japkin-exposicion-esculturas-surcos-espaciales-feria-libro-madrid/

A finales de 2015 le serví de modelo para una escultura que formó parte de una exposición en Barcelona ("Seeds of spaces", con caracolas de papel, como metáforas del mundo de la poesía, la música y la arquitectura, como se ve en la tercera fotografía), y me he acercado a saludarla en esta nueva inauguración. Mientras entraba y salía con ella de la librería por si me ponían una multa -había dejado el coche mal aparcado-, mencioné a Silvia el nombre de Adorno y su obra póstuma "Teoría estética" (1970). Vaya por donde vaya, siempre me pregunto qué es el arte. Lo hago cuando miro un edificio, escucho música, leo un libro, observo cómo se posa una avispa sobre una flor.

Theodor Adorno fue uno de los grandes representantes de la Escuela de Fráncfort y la teoría crítica de inspiración marxista. En las primeras páginas de su "Teoría estética" dice:

"El arte podría tener su contenido en su propia transitoriedad. Puede imaginarse, y no se trata de ninguna posibilidad abstracta, que la gran música solo fuese posible en un determinado período de la humanidad. La revuelta del arte contra el mundo histórico se ha convertido en la revuelta del mundo contra el arte. La crítica de la cultura no tiene porqué hacer callar los gritos más agudos del pesimismo cultural reaccionario: su escándalo ante la idea de que el arte podría haber entrado en la era de su ocaso, idea que Hegel ya tomó en cuenta hace ciento cincuenta años. Hace cien años, la tremenda creación de Rimbaud cumplió en sí misma, de forma anticipatoria, la historia del arte nuevo hasta el último extremo; pero su silencio posterior, su trabajo como asalariado, anticipó también la tendencia del arte nuevo".

Este pequeño video resume algunas de las ideas del libro, además con música de Mahler, mi compositor favorito (y de Adorno):

https://www.youtube.com/watch?v=7Sb5HqsHaOY




1 comentario:

  1. La creación artística implica como diría Adorno, un acto estético que no se puede eliminar del pensamiento abstracto y se crea a partir de algo y que es totalmente diferente a la realidad, por tanto, producimos abstracción. De un objeto en el pensamiento podemos suponer todo un corpus abstracto que parte desde el mismo objeto y lo hace infinito en el pensamiento. El talento creativo según Theodor W. Adorno en su Teoría Estética (1970) es necesario que se separe del sujeto creativo que por mero optimismo iguala y equipara la obra de arte con la propiedad de su propio autor disminuyéndola y reduciéndola. Es necesario pensar en el arte según la legalidad de la producción que se despliega. La mentira es parte del mismo arte donde Adorno percibe la producción como apariencia. Besazo querido Justo Sotelo

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