¿Nunca os habéis encontrado a alguien que os dijera que le recordábais a otra persona o a otra cosa?
Ayer anochecía románticamente junto a un restaurante decadente cuando
un tipo de unos cuarenta años se me acercó y me dijo, con un perfecto
castellano, que mi aspecto le recordaba la portada de un disco de Frank
Sinatra. Me había puesto un traje oscuro, aunque sin corbata, y llevaba
un sombrero como el de ese disco, algo que no suelo hacer desde hace
varios años. También es verdad que la
protagonista de todas las novelas de mi vida y Ava Gardner siempre se
han dado un aire. Lo que no siento ni he sentido jamás son celos, que
son los que definieron la relación entre Sinatra y Gardner.
Casualidades, cine, literatura, pizzas de cuatro quesos y un vino blanco ligeramente seco.
En ocasiones me pregunto por qué pierdo el tiempo escribiendo si la vida es pura literatura. Vaya por donde vaya la literatura siempre sale a mi paso. Aparece por cualquier parte, se acerca a mí, me mira de arriba abajo con curiosidad y me dice algo al oído. Entonces sonrío, ella también lo hace y hasta me abraza.
Luego se echa a volar y me deja una canción:
https://www.youtube.com/watch?v=MiPUv4kXzvw
En ocasiones me pregunto por qué pierdo el tiempo escribiendo si la vida es pura literatura. Vaya por donde vaya la literatura siempre sale a mi paso. Aparece por cualquier parte, se acerca a mí, me mira de arriba abajo con curiosidad y me dice algo al oído. Entonces sonrío, ella también lo hace y hasta me abraza.
Luego se echa a volar y me deja una canción:
https://www.youtube.com/watch?v=MiPUv4kXzvw
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