Hoy empieza la cumbre de la OTAN en Madrid y un iluminado sigue bombardeando un país cercano. Hoy se celebra el Día Internacional del Orgullo LGBT que conmemora los disturbios de Stonewall (New York) ocurridos en 1969, que marcaron el inicio del movimiento de liberación homosexual. Ayer murió gente en el interior de un camión por querer atravesar una frontera, algo similar a lo que ocurrió hace unos días por intentar saltar esa "valla" que los seres humanos no conseguimos quitarnos de la cabeza. En momentos como estos me pregunto si sirve de algo seguir escribiendo en busca de la armonía, del equilibrio, de la belleza, de la amistad y el amor.
No soy de los que se queja, precisamente, y tal vez por eso mismo el desánimo solo me dura unos instantes. Pienso en la canción que se convirtió en el símbolo de la libertad, de los colores y sonrío. En realidad únicamente se necesita a una chica con un violoncelo y a un chico cantando con una guitarra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario