Ayer acabé el
día viendo "La dolce vita", de Federico Fellini, en el Ciné Doré, esa
preciosidad de cine art déco que tenemos en Madrid y es la sede de la
Filmoteca Nacional (tercera fotografía). Este lunes se cumple el
centenario del nacimiento de Fellini.
Sin embargo, vayamos poco a poco.
Una de las cosas que más me gustan es pasear sin rumbo fijo, por el
simple placer de hacerlo. Ayer me fui a dar una vuelta por las calles
que van a dar a la plaza de Lavapiés, uno de los lugares más castizos de
la ciudad, que se ha convertido en los últimos tiempos en un lugar con
un curioso y atractivo mestizaje. Pues bien, en una esquina de la plaza
(primera fotografía) vi una placa dedicada a Isaac Albéniz. Caminando
por allí le vino la inspiración para componer su obra "Lavapiés", que
pertenece al Cuaderno 3 de la "Suit Iberia". La busqué en Youtube y la
estuve escuchando en el móvil sentado en un banco: https://www.youtube.com/watch?v=oxrsBkqNpBQ.
Cerca de la esquina vivió Miguel Ángel Andés, uno de mis grandes amigos
bohemios, que aparece en mis novelas "Vivir es ver pasar" y "Las
mentiras inexactas". Todavía recuerdo cómo me leía páginas del "Ulises"
de Joyce sentados en la terraza de su casa mientras tomábamos el sol.
Caminando por aquellas calles estrechas llegué a un Cáfé de sabor
proustiano, "La fugitiva", donde a veces me siento a leer (segunda
foto). Marcel Proust fue un gran vividor, como Isaac Albéniz, Miguel
Ángel Andés y el propio Justo Sotelo, que es un tipo que me suena
bastante. Llegados a este sitio únicamente me quedaba pasarme por el
Cine Doré, que está a unos pasos de allí, y encontrarme una programación
dedicada al centenario de Federico Fellini. Decir que la vida es bella
quizá sea decir muy poco, en realidad es "La dolce vita". Al salir del
cine era tarde, pero para cenar me bebí una botella de vino blanco frío
que me habían regalado por la mañana. Luego me dormí. Acabo de despertar
y me he puesto a escribir este post mientras me tomo el primer café del
día. Quizá todo lo haya soñado, aunque mi reseca y esta música son de
verdad: https://www.youtube.com/watch?v=9oHzAQ-lJCM
A lo mejor lo soñaste no esta noche pasada sino en alguna anterior o quién sabe si fue años. Quizá lo has recreado en enero 2020 y tu relato se ha diluido del mismo modo que se fraguaban las nociones del tiempo y el espacio en Marcel Proust, semejante construcción que en el inconsciente de Sigmund Freud. Recordar Madrid, recrear sus calles y sus espacios, acercarse al Madrid de Benito Pérez Galdós y transitar por sus plazas y sentarse en un Café a escribir o a leer. ¡Por qué dejar de beber esa botella de vino blanco que te regalaron! A celebrar que la vida es una maravilla y tú perteneces a ella, eres el bohemio empedernido que te pierdes por nuestras callejuelas madrileñas, amaneces por el Pont Neuf de París o comes y te sientas a leer en las escalinatas de la Plaza de España de Roma. En ti la relación entre la lingüística, el mito, la historia, la literatura, el cine y la música corrobora y da el sentido a la lengua y al lenguaje. Te atrae la magia italiana de Federico Fellini, el psicoanálisis de Woody Allen y tu vida se convierte en cinematográfica viendo pasar el tiempo y la historia con la misma mirada de John Berger en el cual, el arte incide en la estética cinematográfica a través del movimiento; lo sorprendente en un momento dado puede ser lo familiar, lo más conocido. El cine a ambos os traslada a un lugar que no puede ser considerado vuestra casa y en medio de ese espectáculo caéis en el abismo maravilloso de ver lo inefable, el refugio de vuestra alma para convertirse en el destierro de la imaginación. Un beso artista Justo Sotelo
ResponderEliminar