Este martes, a las 18.30, nos visitará en el Restaurante Best Princesa (Hotel Indigo, Marqués de Urquijo 4) el escritor (y tertuliano a veces) Demetrio Fernández-González, con un libro fantástico, "Los papeles de Walter Benjamin" (2024, Pigmalión). Escrito en segunda persona, es una recreación del filósofo que se suicidó en Portbou. Descubrí a Benjamin muy joven, cuando me dio por viajar por la Costa Brava, e incluso me propuse escribir una novela situada en Gerona, con este hombre como personaje, pero no me salió, seguramente porque me faltaban muchas lecturas y no estaba preparado para abordarlo en profundidad.
Cuando hacíamos la tertulia en el Gijón, presenté la anterior novela de Demetrio, "Sinfonía de Praga", que mostraba lo melómano que es y lo mucho que admira Europa y las primeras décadas del siglo XX. Quizá por eso al empezar su nueva novela cita la Octava sinfonía de Mahler. Es tan melómano como yo y hace unas semanas me mandó un Wasap desde el Auditorio Nacional para preguntarme si había ido a escuchar la Sexta, pero no coincidimos en el día. La monumental sinfonía se inicia con el “Veni, creator spiritus”, un himno de Vísperas de Pentecostés atribuido a Raban Maur (Hrabanus Maurus en latín), arzobispo de Maguncia en el siglo IX, y, tras un bellísimo intermedio, termina con la escena final del Fausto de Goethe. Es la redención gracias al amor. Solo he escuchado una vez en directo esta obra y es un verdadero placer. La música clásica es increíble en directo. Fue en 2012 en el Auditorio Nacional, con la dirección de Josep Pons, y aún no la he olvidado. He encontrado la grabación en Youtube, aunque acabo de ver otra desde París dirigida por Christoph Eschenbach, un excelente director alemán. La primera vez que me fijé en él fue por la similitud de su apellido con el protagonista de la novela de Thomas Mann "Muerte en Venecia", el escritor Gustav Aschenbach (siempre me he fijado en la gente por estas cosas), que Visconti convirtió en compositor en su película, con el rostro de Dick Bogarde, mientras sonaba la Quinta:
(Siguiendo
con esta época y la literatura y el cine, en otro momento hablaré de la
película que vi ayer en los cines Renoir y que se acaba de estrenar,
"La buena letra", de Celia Rico, basada en la novela de Rafael Chirbes,
uno de los escritores españoles que me interesan. Mientras escribo este
texto aún estoy pensando en ella).
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