"El amor cuando no muere mata y la tertulia me devuelve la vida".

Ayer por la tarde tuvimos una tertulia virtual de altísimo nivel, tanto literario como emocional. Yo sabía que iba a suceder algo así, porque había invitado a hablar de su obra poética a Ruth González Montero, que casi pertenece a mi vida privada. Ruth fue mi alumna en la Facultad y ahora es una abogada de prestigio. No ha publicado ningún libro y lleva sin escribir muchos años, pero la considero una poeta enorme y quería que la conocieran mis amigos de la tertulia. Como lleva la poesía en las venas, quiso que comenzáramos la tertulia escuchando el "Volver" de Gardel y acabarla con "La belleza" de Aute. Entre medias, nos leyó poemas desde los nueve hasta los veintitantos años. Nos dijo que aprendió a recitar incluso antes que a leer, que es como desnudarse ante la gente, como una manera de describir la soledad detrás de la ventana, más dura todavía en estos tiempos de confinamiento (desde su ventana se puede ver el Ayuntamiento de Aranjuez, en la cuarta foto). Y nos leyó un hermoso y melancólico poema de León Felipe sobre el sentido de las ventanas y las ausencias, que pongo al final en un link, y también nos habló de José Agustín Goytisolo, Saramago, Nietzsche, Camus, Horacio, de cómo sufrió por amor, porque el amor cuando no muere mata, como dice la canción de Joaquín Sabina, que estudió Filología Románica y leyó mucho a César Vallejo y Neruda de joven. Ahora Ruth es feliz gracias a su hija y un poquito por nuestra tertulia y mis posts de Facebook. Tras escucharle decir estas palabras pensé que tal vez debería replantearme si sigo escribiendo por aquí o no, porque algo parecido me han dicho otras personas y no me gustan las obligaciones, las detesto. Pero volviendo a Ruth, quiero añadir que escucharla hablar de literatura es entrar como alumno a una clase en la que brillan con fuerza las metáforas de sus ojos. En Marsella estaba Elena, su amiga íntima desde COU (en la tercera foto) y a las ocho empezamos a aplaudir a Ruth y a las personas que están contribuyendo a hacer un poco más dulce este período extraño de nuestras vidas. 

Este es el poema, "¡Qué lástima!", que nos recitó Ruth de León Felipe, uno de los mayores poetas que ha habido en la España del siglo XX y que, para variar, tuvo que exiliarse y morir en México. En su obra veo resonancias de la Biblia, Shakespeare y Whitman:

https://www.zendalibros.com/lastima-leon-felipe/

Y esta es la belleza de Aute, que es la belleza de Ruth, porque una cosa es escribir y otra respirar poesía:

https://www.youtube.com/watch?v=uxYdyXGHZxs