viernes, 31 de diciembre de 2021

"Rainbow".

Paseando ayer por Madrid encontré el arcoíris, y eso que no había llovido. 
 
Después de sacar la fotografía, me vinieron a la cabeza los versos del "coro místico" de Goethe con los que acaba su "Fausto": "Todo lo que ha ocurrido/ es solo una parábola./ Lo que es inalcanzable/ se convierte en suceso./ Lo que es indescriptible/ se ha realizado aquí./ Lo eterno-femenino/ nos permite avanzar". La Nochevieja me sabe mejor con una copa de Porto en la mano para acompañar a la sopa de almendras y la lombarda que siempre olerán a mis padres, y otra de Möet Chandon para brindar por la vida y el amor, por ese lugar donde termina el arcoíris y me gusta tocar con la yema de los dedos.
 
Ese lugar donde estás tú, mi eterno femenino:
 

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