Hoy me he dado una vuelta con el coche por los pueblos cercanos a la sierra de Madrid ya que quería ver de cerca la nieve. Mientras escuchaba el tercer movimiento de la Cuarta Sinfonía de Mahler, el Ruhevoll, una de las páginas más bellas de la música, me ha llegado un Wasap de la escritora malagueña Presina Pereiro. Se encuentra con las pruebas de su próxima novela, y por esto ha aprovechado para enviarme unas páginas donde aparece un tal Justo Sotelo, un ginecólogo republicano, conversando en el hotel más elegante de Málaga, el "Miramar". Me ha preguntado que si me importa ser un personaje de su novela, y en ese momento me he acordado de una anécdota que nos ocurrió el año pasado, cuando presenté su último libro en la Librería Machado del Círculo de Bellas Artes de Madrid. Nos acabábamos de sentar en la terracita, junto al actor y cantante Toni Zenet, cuando se nos acercaron dos jóvenes argentinas con unas cámaras y nos preguntaron si nos podían sacar fotografías. Y nos pidieron nuestros nombres y nos hicieron muchas fotos, vamos, como si fuéramos unas celebridades. Nos dijeron que se llamaban Mariana y Delfina (se encuentran a la izquierda en la fotografía que nos sacó un camarero, con Presina en el centro), y charlamos un poco sobre lo que les parecía Madrid.
¿Quién ha dicho que no se puede llevar una vida de película o de novela?
Esta es la música de una de las múltiples películas o novelas de mi vida:
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